Siempre me ha gustado observar los diferentes matices que un color puede llegar a adquirir, dependiendo de la naturaleza de cada material. Recuerdo que cuando era niña, esto suponía un juego para mí, no dejaba de maravillarme, casi tanto como contemplar un paisaje y enumerar infinidad de verdes, ocres, castaños, azules … Aquel «ejercicio» me procuraba bienestar, calma, mucha paz. Lejos estaba yo de saber nada sobre los beneficios de la cromoterapia, ni de como el disfrute del color puede llegar a influir positivamente a nivel físico y emocional. Tan cierto como curioso, pero así es ¡puedo dar fe de ello!
«The Chocolate» es una pieza monocromática, quizá de entrada no parezca la ideal para ilustrar este texto, pero en ella pueden apreciarse muchos matices de un mismo tono …, al hilo de lo lo primero que te comentaba. Por supuesto, como siempre ocurre, al natural el diseño gana en todos los sentidos.
Sobre «The Chocolate» añadir que la sobriedad de su gama de bronces contribuye a realzar elegancia, clase y estilo, cualquiera que sea el look que elijas. Así de fácil es diferenciarse sin pretenderlo, porque esto es algo que solo se consigue cuando fluye de un modo natural.
¡Los marrones también son para el verano! Tienen el poder de mimetizarse con la piel bronceada y, por contraste, combinan genial con la más amplia paleta de tonos vivos y alegres que, sin duda son los que con frecuencia elegimos para vestir en esta época. Además es el tono estrella en mis diseños de inspiración étnica.
Ya disponible en Tienda Online, en la cabecera de este post, a pie de foto, y bajo estas lineas, te he dejado el enlace, por si deseas acceder a su descripción y precio.
Espero que te encante ¡Ah! y por favor, no olvides valorar su carácter de pieza única y por lo tanto; su exclusividad.
Muchas gracias.