Descripción
Cruz griega, irregular, arcaica. Teñida en un tono hueso, casi blanquecino, muy oscurecido en sus bordes desgastados y fosilizados.
Sobre ella he compuesto un pequeño montaje aparentemente caótico, con cristalitos muy abigarrados, que asciende desde el vértice que sostiene la cruz, hacia el cordón, describiéndo una pirámide invertida cuya base queda definida por una punta de cuarzo muy tosca, laminada en oro. Sobre ella una ristra con tres pequeñas cuentas de granito. Entre los cristales; cuarzo blanco, Murano, citrino y cuarzo ahumado.
El cordón es de terciopelo elástico. Remata a la altura de la nuca con cierre de mosquetón metálico y una cadenita que permite graduar el largo.
Pieza ligera, en mi línea más “sencilla”, pero no por ello carente de carácter. Es fácil identificar en ella mi peculiar sello. En la gama de neutros, elegante y muy favorecedora, original y fácil de llevar.
